Me gusta presumir
de ser lo menos prejuicioso posible a la hora de ir al cine, pero no hay que confundir
esto con tener expectativas. Tener buenas o malas expectativas ante una película
es inevitable; esperamos que un film sea bueno o malo, pero esa anticipación no
afecta realmente al producto final (o al menos no debería). Por otro lado, ser
prejuicioso es dar un juicio de valor sumamente apresurado, usualmente sin
experimentar antes aquello que se está juzgando. Lo anterior cobra relevancia
para mi después de ver Don Gato: El
Inicio de la Pandilla, ya que esta película fue la gota que derramo el
vaso. Táchenme de poco profesional, sangrón, payaso, mamón, amargado o todo lo
anterior pero de aquí en adelante no pienso volver a darle el beneficio de la
duda a cualquier producción proveniente de Ánima Estudios, y asumiré inmediatamente
que la producción en cuestión es un ejercicio más en el “arte” de la
mediocridad que caracteriza a este estudio de animación mexicano.
Aunque la trama se
esconde muy sutilmente en su titulo, Don
Gato: El Inicio de la Pandilla nos cuenta la historia del nacimiento de la “organización”
del famoso Don Gato. La vida de Don Gato se complica cuando conoce a otro gato
callejero y viendo una oportunidad de aprovecharse del inocente y manipulable
Benito, Don Gato decide comenzar una “sociedad” con él. Aunque esta alianza
parece ser lo suficientemente lucrativa para ambos, todo se pone de cabeza
cuando el par de gatos se cruza en el camino de un peligroso mafioso y un maletín
lleno de diamantes.
No hay
porque dar tantos rodeos: la película es muy mala por muchas y variadas
razones.
La animación
de los modelos hechos por computadora se siente forzada todo el tiempo, como si
se estuviéramos viendo un montón de muñecos con pocas o nulas articulaciones.
Hay que reconocer que los diseños de los personajes son bastante fieles a los
de la caricatura original, pero el nada pequeño problema es que esos diseños
fueron pensados para animación tradicional y la gran mayoría simplemente no se traslada
bien a la animación por computadora con modelos en 3D. Todos los escenarios
carecen de vida, y la gran mayoría parece una malograda maqueta hecha con cajas
de cartón que un niño hizo a las últimas horas del domingo para entregar como
tarea al día siguiente.
A pesar de
que supuestamente la “historia” es una precuela de la caricatura original,
nunca se desarrolla a ninguno de sus personajes de manera adecuada. Tal vez la única
excepción sea Espanto, pero su “crecimiento” como personaje es poco más que un
chiste con muy poca gracia. No se nos revela ningún dato sobre los
protagonistas que no se haya conocido antes, e incluso la personalidad de cada
uno casi se limita exclusivamente al tipo de inflexión que utilizan al hablar.
Aunque nunca
me he podido nombrarme como un fan de hueso colorado de Don Gato y su Pandilla,
hasta yo debo de reconocer que la serie original cuenta con un encanto difícil de
replicar, esto en gran medida al excelente trabajo de doblaje y adaptación con
el que gozo la serie en nuestro país, pero lamentablemente nada de esa “magia”
se ve reflejada en esta película. Tengo que admitir que la cinta si llego a
hacerme sonreír por lo menos en un par de ocasiones, pero esto difícilmente justifica
el resto de la película que provoca más bostezos que risas. Ánima Estudios ya
tiene más de diez años en el negocio de la animación, y en ese tiempo poco o
nada ha hecho por mejorar la calidad de su trabajo, y no sé ustedes, pero yo
estoy cansado de que ese estudio de animación se escude en “es una compañía mexicana”
como un pretexto para realizar trabajos que en el mejor de los casos resultan
mediocre y que dan pena ajena en el peor. Háganse un favor a ustedes mismos y
eviten a toda costa Don Gato: El Inicio
de la Pandilla. Si quieren tener un buen rato con estos personajes, consíganse
la serie original y véanla desde la comodidad de su casa.
Don Gato: El
Inicio de la Pandilla: 1/5. Mala.
Peor que:
Don Gato y su Pandilla: La Película (2011), Guardianes de Oz (2015), Don Gato y
su Pandilla, la serie original (1961)
Mejor que: La
Leyenda de la Nahuala (2007), La Leyenda de la Llorona (2011), La Leyenda de
las Momias de Guanajuato (2014)
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