Adaptación: Remy Bastien

Guion: Mario Hernández

Dibujo: Humberto Ramírez

Portada: Rodolfo Pérez

Publicado en México por Novedades Editores

el 11 de Mayo de 1988

Era el año de 1568, cuando Rey Felipe II Rey de España, hijo de Carlos I, tras cuya abdicación subió al trono en 1556, había elegido definitivamente Madrid como corte y "El Escorial" como austera fortaleza, residencia real y panteón, es ahí donde se cuenta que fue visto Miguel de Cervantes quien en compañía de su amigo Mateo Vázquez, acudían a visitar al cardenal Julio Acquaviva, quien fue designado por el papa para tratar con el Rey Felipe y quien buscaba ser parte del sequito de el cardenal y así poder viajar con el a Italia, y cuando el cardenal leyó lo que Cervantes había leído complacido lo invito a formar parte de su grupo de trabajo, con esto Miguel de cervantes viajo a Italia y con esto podría continuar con su carrera de poeta, pero el desencanto llego para miguel quien en medio de tanta servidumbre, pronto se vio inmiscuido en algunas peleas con las espadas logrando siempre salir airoso y es que el llamado de la batalla siempre lo atrajo con la misma pasión con que escribía sus poemas.

Poco después Miguel se disculpo con su amo el cardenal Julio Acquaviva indicándole que los soldados cristianos eran llamados a defender a su reinado, así fue como cumplió uno de sus sueños y en 1570 deja el palacio del cardenal para tomar una plaza como soldado al servicio de Diego de Urbina, indicando que las armas le darían grandeza y fama, y además disfrutaba de los viajes a bordo de las naves de combate donde abundaban las peleas y hurtos entre la tripulación, pero Miguel de Cervantes soñaba aun en esos lugares con la gloria de los héroes, mientras viajaba de Venecia a Nápoles y a Génova, fue así que en 1571 una poderosa escuadra Turca avanzo hacia el occidente por el mediterráneo, siendo Soliman II, sultán de Turquía quería arrancar La Cruz de San Pedro en Roma y sustituirla por la Media Luna Musulmana, entonces España envió sus barcos, al mando de Don Juan de Austria, hermanastro del Rey Felipe II, para que se unieran a los barcos de Venecia y los estados pontificos, y era precisamente en una de esas naves que viajaba Miguel de Cervantes.

Miguel siempre mostro coraje por entrar en batalla y se mostraba seguro de alcanzar la victoria, siendo el 15 de septiembre de 1571 que se hizo a la mar la escuadra y en "La Marquesa" que viajaba Miguel con sus sueños de gloria y fue en Lepanto cerca de las costas de Grecia donde las flotas de los aliados cristianos se encontraron con la escuadra Turca, pero los sueños de Miguel de pelear se vieron en peligro, pues justo ese día es que cayó enfermo victima de fuertes fiebres en ese 7 de octubre de 1571 y que fue cuando sonó el primer cañonazo, pero aun así el subió a cubierta y buscaba pelear a pesar de que sus superiores le indicaban que no luchara, pero ante la insistencia de Cervantes le fueron asignados doce hombres pera defender una buena parte del barco, siendo el valor y heroísmo de Cervantes lo que los llevaría a la victoria, pero no fue fácil pues un barco Turco embistió el barco de Cervantes y además Miguel fue herido en una mano, pero ni eso pudo impedir que se llevaran la victoria, donde ocho mil cristianos y veinticinco mil turcos perecieron en combate cuerpo a cuerpo, espada contra alfanje sobre las cubiertas bamboleantes de los barcos que se hundían.

Don Juan de Austria , informado del heroísmo de Miguel en la defensa del esfinque lo visito con señalada cortesía y admiración, llegando poco después el 31 de octubre a la ciudad de Mesina y ahí Miguel llego malherido directo al hospital, por desgracia la mano herida dio pie a la gangrena, pero atendido por un excelente medico le ayudo para no perder el brazo, una vez desaparecida la gangrena, la mano le quedo inútil a Miguel, pero este defecto físico le honro siempre, sus compañeros le apodaron entonces "El Manco de Lepanto", pero Miguel se curó lentamente de sus heridas en un hospital y a fines de abril de 1572 se incorporo al tercio de Lope de Figueroa y así al mando de este y buscando a los Turcos hallaron una nave pirata a la que vencieron y después llevaron de regreso a Sicilia, sin embargo una vez ahí se dio una ruptura en dichas escuadras cuando Francia firmo las paces con los Turcos, esto obligo a Miguel a dejar por un tiempo las armas y empezó a leer cada vez más libros y fue en ese tiempo que se encontró con su hermano Rodrigo con quien paso algún tiempo.

Poco después Don Juan de Austria pidió a Miguel que le acompañara al África donde llegaron hasta "La Goleta" puerto del África donde lucharon con tal decisión que la victoria llego para estos hombres valientes, poco después le fue entregado a Don Juan de Austria la ciudad de Túnez sin pelea, pero cuando recibieron órdenes de volver a Génova por que había algunos disturbios que controlar, fue entonces que los turcos se prestaron a arrebatar la ciudad de Túnez, todo esto sirvió a Miguel para conocer más del mundo y cada vez se volvía mas y mas culto en las letras, pero adelantando un poco podemos llegar hasta el día en que se caso con Catalina de Salazar el 12 de diciembre de 1584 en una triste ceremonia, pues no asistieron familiares ni de ella ni de él, pues todos se oponían al matrimonio, al poco tiempo también cuando ya había publicado varios libros, había un joven que le empezaba a causar sombra con sus libros y poemas, ese hombre era Lope de Vega y fue entonces que Cervantes volvió a la corte.

Poco después fue arrestado y en Sevilla en 1602, dentro de su calabozo, escribió su primer borrador de Don Quijote, su máxima obra de la literatura española, muchos borradores fueron escritos por Miguel y en 1603 salió libre de Sevilla para no volver nunca, entonces dio a leer su Quijote a Francisco Robles y este editor se divirtió enormemente leyendo aquellas aventuras y fue así que El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha se publico en 1605 y su fama corrió rápidamente por todo el país, dando pie a la mayor fama del escritor y poeta, al final de su vida Miguel busco la compañía de su esposa Doña Catalina y acordaron vivir juntos en Valladolid, grandes personalidades lo felicitaron por su trabajo y mientras empezaba a vivir sus creaciones y a los sesenta y ocho años, su gran corazón no soporto mas el rigor del tiempo y las emociones y el gran hombre enfermo gravemente, pero antes de morir dicto una carta al Conde de Lemos, siendo el 23 de abril de 1616 que la muerte llamo a su puerta, pero su luz creadora alumbra a toda la humanidad perpetuamente, en sus tumba se escribió un bello epitafio, sin embargo con el tiempo se perdió y hoy en día se ignora el sitio en que estuvo enterrado, pero ahí esta para siempre la figura del viejo y valeroso caballero, cuya delgada sombra se proyecta del uno al otro confín del mundo, por los siglos de los siglos.