El legítimo orden comiqueril

NOTICIAS
author image |marzo 24, 2018

 
Siempre, SIEMPRE que empiezo a creer que el cine mexicano tiene aunque sea una leve esperanza de mejorar, llega alguna producción a patearme las bolas y recordarme que el cine nacional prefiere regodearse en su propia inmundicia, con películas que solo te hacen perder el tiempo y que son un insulto a la inteligencia de cualquier persona que se atreva a verlas. El más reciente recordatorio de esta triste realidad se llama Tuya, Mía… Te La Apuesto.
Normalmente les doy una pequeña sinopsis para que sepan más o menos de que se trata la película, pero en este caso les voy a contar toda la historia, y quizá con eso se les quiten las ganas, aunque sean remotas, de ver esta mierda. Un wey esta obsesionado con la selección mexicana de futbol y apuesta todos los ahorros de su vida en un partido. El imbécil este cree que la selección siempre gana cuando él mismo los ve jugar en el estadio, pero la sorpresiva muerte de un familiar hace que no pueda ir al partido. El resto de la película es ver al protagonista tratar de salirse del funeral de su tío para ir al estadio.
¿Ven? ¿Qué tanto me tarde en contarles la trama? No lo sé, pero definitivamente no fueron casi una hora y media miserable y agobiante. La película es UN solo chiste que se estira hasta romperse, y de hecho ni siquiera es un chiste gracioso. ¿Quieren que les cuente el punto más “alto” de la comedia del filme? El personaje principal grita “¡Goool!” durante el funeral de su tío ¿Eso les parece gracioso? Bueno, espero que estén dispuestos a desperdiciar 95 minutos para llegar a esa “hilarante” conclusión.
El protagonista es uno de los personajes más odiosos que haya visto en una película. Flojo, manipulador, celoso, mentiroso, irrespetuoso,  mal intencionado y sin ninguna cualidad que lo haga remotamente redimible, estas son las características de un personaje al que debemos seguir durante toda la película y al que, supuestamente, debemos de “apoyar”. El protagonista no tiene ninguna presencia en su propia historia, ya que su único objetivo es querer ver un partido de futbol, y aun con su superstición de que eso lo ayudara a ganar una apuesta, el resultado del partido no es influenciado por las estupideces de este imbécil.
Al final, esta mierda de ser humano gana la apuesta, pero se queda sin trabajo, lo corren de su casa y su mujer lo abandona. Este es el momento en el que la misma historia tiene la oportunidad de redimirse, haciendo ver al protagonista el error de sus acciones y aprender de sus fallas para convertirse en una mejor persona, con esto terminando su propio arco de personaje y llegando a un final no tan malo… PERO NO, el tipo se siente mal por dos segundo y después recuerda que siempre tendrá a la selección de futbol, porque eso es lo más importante en la vida. Según algún descerebrado, esto podría considerarse como “humor negro”, pero hasta donde yo sé, el “humor” debe ser gracioso, lo cual esta película NUNCA ES.
No hay absolutamente nada que valga la pena en Tuya, Mía… Te La Apuesto. El supuesto humor es prácticamente inexistente, los personajes son odiosos y ninguno de los supuestos enredos es interesante o entretenido. La trama es un chiste de cinco minutos que se alarga por hora y media, sin nada que nos entretenga en todo ese tiempo. Por favor, no regalen su dinero ni su tiempo a esta mierda. Sé que yo soy parte del problema, estoy dolorosamente consiente de esto, después de todo yo fui a ver esta mierda al cine, pero mientras sigamos pagando por basura, el cine mexicano nos seguirá dando precisamente eso: basura. Cada quien sus gustos, pero por amor de Dios, ustedes son mejores que esto, ustedes MERECEN algo mejor que esto.
¿Quieren poner más sal a la herida? Estaba a punto de publicar esta reseña cuando me puse a investigar un poco más y acabo de ver que esta película no es más que la versión mexicana de una película colombiana llamada “La Pena Máxima”, así que además de pésima, Tuya, Mía… Te La Apuesto es un vil plagio. Cine mexicano, desde lo más profundo de mi retorcido y muerto corazón: ¡¡¡CHINGA A TU REPUTISIMA MADRE!!!

Tuya, Mía… Te La Apuesto: 0/5. Ofensivamente mala.
 
 
 
 
 
 
¿Esperan la sección de “Mejor que” y “No tan buena como”? Digámoslo así, quiero felicitar a Lo Más Sencillo Es Complicarlo Todo, ya que ahora es tan sólo la segunda peor película que he visto este año, siendo Tuya, Mía… Te La Apuesto la indiscutible “ganadora” del título de peor película en lo que va del 2018.

Aquí les dejo el trailer de la película original para que comparen
author image |marzo 23, 2018

 
No me importa si al decir esto pierdo por completo su respeto (de todos modos creo que nunca lo he tenido): AMO Titanes del Pacífico, fácilmente una de mis películas favoritas de todos los tiempos. No voy a decir que la primera película sea una obra maestra del cine, pero de que lo considero un “clásico moderno” del entretenimiento, eso se los puedo poner por escrito si quieren. Es por esto que Titanes del Pacífico: La Insurrección tiene la difícil tarea de seguir con el legado de una excelente película, y aunque me duela decirlo, aunque esta secuela sí llega a ser bastante entretenida, se queda muy, MUY corta en comparación con su predecesora.
En Titanes del Pacífico: La Insurrección veremos a un grupo de pilotos manejando robots gigantes que pelean con enormes monstruo, y a final de cuentas ¿Qué no es precisamente eso lo que hace que valga la pena estar vivo? Han pasado diez años desde la última batalla contra los Kaiju, y aunque el mundo se encuentra en relativa calma, la humanidad no ha bájalo la guardia y ha continuado con la construcción de robots gigantes conocidos como Jaeger, por si algún día la amenaza Kaiju regresa. Mientras nuevos candidatos se unen al programa Jaeger, un misterioso robot rebelde aparece y ataca Sídney, Australia, lo cual será el primer paso de un intrincado plan de un misterioso y peligroso nuevo enemigo.
Lo reconozco, el atractivo principal de la primera Titanes del Pacífico es ver pelear robots gigantes contra monstruos colosales, tal vez no sea lo más intelectualmente estimulante en este planeta, pero pocas cosas son más divertidas que eso. Aun así la película lograba mantener tu atención con lo simple de su premisa: los humanos deben ganarle a los monstruos, una trama demasiado sencilla pero que desde el inicio le da a los personajes un objetivo claro, algo que no sucede en La Insurrección. Hay dos tramas principales, la de los nuevos reclutas y la del enemigo misteriosos, y aunque en teoría son buenos puntos de partida para contarnos una buena historia, ninguna de las dos tramas resulta verdaderamente interesante.
La trama de los cadetes es la clásica historia de “el nuevo “ (en este caso “LA nueva”) que debe probar su valía a sus superiores, y si han visto cualquier película sobre milicia de ciencia ficción, ya saben cómo termina esa historia. Por el otro lado, la historia del antagonista misterioso nunca llega a despertar la curiosidad del espectador, y de hecho esa trama se sabotea a si misma mostrándonos la identidad del villano a media película, solo para más tarde volver a hacerlo y esperar que resulte una revelación inesperada, lo cual definitivamente no es. Es como si le avisaras a alguien que le vas a hacer una fiesta sorpresa ¿Qué no avisar mata instantáneamente el factor sorpresa?
Pero bueno, si la historia es débil ¿Qué hay de los efectos especiales? A eso es a lo que venimos a final de cuentas. Las peleas son entretenidas y se ven bastante bien… siempre y cuando no haya personajes humanos en escena. Este es un detalle que también ocurría en la primera cinta, pero por alguna razón se ve más acentuado en esta secuela, las escenas que involucran a civiles junto a los enormes figuras hechas por computadora se ven mal, muy poco creíbles, como si ambos objetos no se encontraran en el mismo espacio físico, lo cual evidentemente es el caso, pero que debido a la composición de estas escenas hace que se rompa la ilusión de realismo, aunque bueno, el realismo no es precisamente una prioridad en una película de robots gigantes.
Lo que hay que contestar aquí es ¿Titanes del Pacífico: La Insurrección vale la pena? Creo que la respuesta depende de que esperen de la cinta. Si quieren ver a personajes interesantes en una dramática historia para salvar a la humanidad, lamento decir que no lo verán aquí; por otro lado, si lo único que quieren es ver a monigotes gigantes golpeándose unos a otros en la cara, La Insurrección cumple con ese trabajo, y disfrutar de este tipo de acción infantil y sin sentido es la misma definición de la felicidad, por lo menos para mí. Voy a ser honestos, mis  gustos personales me hicieron disfrutar mucho de Titanes del Pacífico: La Insurrección, pero pienso que si no se tiene ese gusto adquirido por robots gigantes o la ciencia ficción en general, La Insurrección no es más que una de tantas películas de acción. Titanes del Pacífico: La Insurrección es buena para los fans de la ciencia ficción y/o fantasía, pero si no cuentan con ese gusto, mejor vean la primera película, que es capaz de entretener a cualquiera y que es mucho mejor que la secuela.

Titanes del Pacífico: La Insurrección: 2/5. Meh.
 
 
 
 
 
 




Mejor que: Cualquiera de las películas de Transformers (2007 -2017)
No tan buena como: Titanes del Pacífico (2013)
author image |marzo 21, 2018

 
Movimiento, aunque sea poco y casi imperceptible, siempre será mejor que el total estancamiento; esto lo digo porque de cierta manera Todo Mal me sorprendió con algunos de sus aspectos técnicos, PERO en cuanto al guion y la comedia deja mucho que desear, y no lo digo solo por mi desprecio al cine mexicano (aunque no niego que eso termina influyendo mi opinión).
En Todo Mal veremos a tres amigos tratando de recuperar una reliquia histórica perdida. Fernando (Osvaldo Benavides) es un funcionario de relaciones exteriores que está a punto de casarse, desafortunadamente para él, debido a un mal entendido, la fecha de su boda es la misma en la que debe recibir el penacho de Moctezuma como un préstamo del gobierno austriaco para la exhibición de un museo. Al enterarse de una infidelidad por parte de su prometida, Fernando roba el penacho y se va de borrachera. Preocupados por el bienestar de su primo y amigo, Matías (Alfonso Dosal) y Dante (Martín Altomaro) deberán buscar a Fernando y recuperar la reliquia histórica antes de que quede totalmente destruida.
Sin sarcasmo ni menosprecio (sé que es difícil de creer, a mí también me sorprende), tengo que reconocer que a nivel técnico Todo Mal es bastante buena, sobre todo al compararlas con otras producciones mexicana. El trabajo de cámaras es muy bueno, en ocasiones innecesariamente rebuscado, como si la cineasta responsable solo nos quisiera presumir que sabe hacer bien su trabajo, y dando honor a quien honor merece, en verdad que es un buen trabajo.
Y hasta ahí llegan las flores que tengo que arrojarle a esta cinta. Hay un gran problema con la producción: no es graciosa, lo cual es bastante serio cuando se supone que tu película es una comedia. No sabría decirles con exactitud el porqué, pero el humor simplemente no funciona, pero al menos no es sólo comedia “de pastelazo” o chistes tontos que te cuenta tu tío borracho en una reunión familiar. Tal vez sólo es porque no tengo sentido del humor, pero la frase “te vamos a meter un balazo en el culo” simplemente no me parece graciosa, y mucho menos cuando se repite hasta el cansancio. Los chistes simplemente no dan risa, pero al menos tampoco dan pena ajena. El menor de dos males, supongo.
Otro fallo importante es la casi nula química que hay entre los protagonistas. La cinta nos dice que los personajes, además de ser familiares de sangre, son amigos, pero esta amistad nunca se siente demasiad creíble que digamos. Los personajes funcionan parcialmente bien por si solos, pero a la hora de compartir tiempo en pantalla, la convivencia se siente demasiado forzada y el choque de personalidades nunca es creíble ni gracioso. Lo más cercano a algo chistoso es el personaje de Dante, un amargado profesor de literatura con tendencias antisociales, con delirios de grandeza, que usa constantemente un vocabulario tremendamente artificioso con tal de sonar más inteligente de lo que verdaderamente es y con problemas emocionales causados por un amor no correspondió que tiene años atormentándolo, probablemente haciéndolo ir al cine obsesivamente a ver toda película que puede para distraerse lo suficiente de su miserable vida y no pensar en volarse los sesos cada mañana, además de beber cada noche y llorar hasta dormirse, con la constante esperanza de no tener que volver a abrir los ojos y que alguien se apiade de él y le meta una bala entre ceja y oreja para acabar con su miseria… pero… n-no… no es que yo sepa nada de esas cosas o algo así…


Ejem…  En el aspecto técnico, aunque suene demasiado exagerado, Todo Mal es una producción de muy buena calidad, me atrevería a decir que hasta sobresaliente, aunque de nuevo, esto si la comparamos con otras películas mexicanas. El guion trata de hacemos reír con lo extravagante e impredecible de las situaciones en las que se ven envueltos los personajes, y aunque esto si puede ser parcialmente entretenido, no es lo suficientemente bueno como para hacer reír. Evidentemente Todo Mal no es la joya del cine que viene a salvar a la industria, pero al menos es un pequeño, muy pequeño paso hacia la dirección correcta.

Todo Mal: 2/5. Meh.
 
 
 
 
 
 
 
 
Mejor que: Cómplices (2018), Lo Más Sencillo Es Complicarlo Todo (2018), Una Mujer Sin Filtro (2018).
No tan buena como: Matando Cabos (2004).
author image |marzo 21, 2018

 
El problema no es que el cine este repleto de adaptaciones de libros o comics o cualquier otro medio narrativo que se les pueda ocurrir, el verdadero problemas es que la gran mayoría de esas adaptaciones son pésimas, casi siempre dando una mala representación del material que se está adaptando, con lo que se termina perdiendo el encanto de la obra original. El triste ejemplo más claro de lo anterior es Las Travesuras de Peter Rabbit, una película basada en una serie de libros infantiles que pierde todo el espíritu de inocencia y lo sustituye con malicia y muy malas decisiones.
En Las Travesuras de Peter Rabbit veremos a una familia de conejos interactuando con su nuevo vecino humano. Peter Rabbiy y su familia viven felices en el campo, conviviendo con su vecina humana Bea (Rose Byrne). La vida de Peter cambiara drásticamente cuando un nuevo habitante llega al campo, el excéntrico y algo estirado Thomas (Domhall Gleenson).  Sin poder llevarse bien entre ellos, Peter y Thomas comenzaran una batalla entre ellos para ganarse y mantener el afecto de Bea.
Antes de que me lo pregunten, no, no estoy familiarizado con los libres de Peter Rabbit, pero si ese es el caso ¿Cómo es que me atrevo a decir que la película no es fiel al material original? Bueno, porque sencillamente no creo que una popular serie de libros infantiles tenga como protagonista a un malicioso y molesto conejo y aun así pueda lograr el éxito con un público infantil muy pequeño. Un gran, GRAN problema con Las Travesuras de Peter Rabbit es su personaje principal. No pienso negar que el diseño del personaje sea muy bueno, algo que solo se acentúa con la excelente animación, pero me es difícil empatizar con un protagonista que se vanagloria de la muerte de otro personaje. Llámenme exagerado si quieren, pero eso me parece demasiado cruel, gracioso tal vez, pero nada adecuado para lo que esencialmente es un a película dirigida a niños muy pequeños.
La trama es otro problema, ya que en ocasiones se siente como una comedia romántica (y ya conocen mi desdén por ese género), lo cual no suena tan mal en un principio, pero déjenme recordarles que el “triángulo amoroso” de la historia se da entre una mujer, un hombre y UN CONEJO DE CARICATURA, y de nuevo, uno personaje que resulta más odioso que tierno, lo cual suena mucho más gracioso de lo que verdaderamente es.
Creo que todos los puntos malos de la cinta se pueden resumir diciendo que se intentó actualizar algo que no era necesario moderniza. Los personajes parecen psicóticos en lugar de traviesos, la banda sonora está repleta de música que pasó de moda hace años pero que algún ejecutivo inepto de Sony piensa que es la música que le gusta a “la chaviza” y aunque el diseño de personajes y la animación son verdaderamente buenos, el hecho de que la personalidad de los protagonistas sea tan odiosa hace imposible empatizar con ellos. Las Travesuras de Peter Rabbit sí hará reír a su público objetivo, y de hecho no voy a negar que a mí mismo me hizo reír en un par de ocasiones, pero el espíritu de la producción se siente “malicioso”, como si creyeran que una tierna  historia de conejitos viviendo en el bosque no sea suficientemente interesante y decidieran tratar de arreglarla con un montón de malos chistes y clichés que no vienen al caso. No es ni de cerca la peor película que combina animación con actores reales, y aunque si pueda entretener a los más pequeños de la casa, sus niños merecen algo mejor que esto.

Las Travesuras de Peter Rabbit: 1/5. Mala.
 
 
 
 
 
 
 
Mejor que: El Pájaro Loco (2017).
No tan buena como: Paddington 2 (2017).
author image |marzo 21, 2018

 
No pienso negar la importancia que tuvo en su momento el personaje de Lara Croft en el ámbito de los videojuegos, siendo una de las figuras femeninas más reconocidas e importantes en su medio, pero seamos completamente honestos, el personaje nunca fue más que Indiana Jones con boobies, no que eso tenga algo de malo, solo digo que no es la sima de la originalidad. El personaje puede no ser tan popular como en el pasado, pero su presencia ha sido constante dentro y fuera del medio de los videojuegos, por lo que no es gran sorpresa que se intente hacer que el personaje llegue al el cine (de hecho no es la primera vez), en esta ocasión con Tomb Raider: Las Aventuras de Lara Croft, una película que se queda un poco corta al compararla con el legado del personaje pero que puede ser una buena introducción al personaje.
En Tomb Raider: Las Aventuras de Lara Croft veremos a una exploradora en busca de un tesoro perdido. Han pasado algunos años desde que Richard Croft (Dominic West) desaparecio misteriosamente, sin embargo su hija Lara (Alicia Vikander) se niega a perder la esperanza de volver a verlo. La ilusión de Lara por reencontrar a su padre continúa con más fuerza cuando la joven encuentra documentos secretos sobre su padre y su búsqueda de un tesoro arqueológico. Con tan muy pocas pistas, Lara Croft se lanza a la aventura para tratar de encontrar a su padre, una aventura mucho más peligrosa de lo que ella misma se imagina.
No sé si fue por parte del director o el mismo editor del filme, pero parece que alguno de ellos quedo tan enamorado de su propio trabajo que se negaron a recortar muchísimas escenas. La película presenta varias secuencias que nos muestran la misma información una y otra vez, además de que otras tantas escenas parecen colocarse en un orden diferente al indicado por el guion, con ello provocando que se den varios errores de continuidad, los cuales tal vez no sean gran cosa, pero hacen sentir que la producción parezca descuidada y muy a la “ahí se va”.
Normalmente comparar las escenas de acción con un videojuego podría considerarse como un insulto, pero si tomamos en cuenta que esta película está basada en una franquicia de videojuegos, la comparación es adecuada. Las escenas de acción pueden parecer poco realistas, creo que eso no se puede discutir, pero aunque no sean del todo originales, logran darnos unos cuantos momentos emocionantes de vez en cuando. Tal vez lo que voy a decir no tendrá sentido para aquellos que no estén familiarizados con los videojuegos, pero me resulta curioso ver en un principio Lara Croft le robo escenas de acción a Indiana Jones, luego Nathan Drake le robo su esencia a Lara Croft y ahora esta película le vuelve a robar a Nathan Drake para dárselo de regreso a Lara Croft. Ladrón que roba a ladrón, supongo.
La historia, aunque entretenida, es muy poco interesante. Sé que el molde del intrépido explorador en busca de un tesoro perdido tiene su propio encanto, pero Tomb Raider no hace nada nuevo o inesperado con esta fórmula, lo cual es más o menos entendible, no hay que arreglar lo que no está roto, pero esto mismo hace que la película se sienta completamente genérica y, fuera del famoso nombre de su protagonista, no hay nada que la haga destacar de otras tantas películas de aventura.
Tomb Raider funciona bien por su propia cuenta, pero no lo suficiente como para quedarse por mucho tiempo en la mente  del espectador. Los hoyos en la trama y lo poco original del guion hacen que la producción se sienta un tanto apresurada, como si a la película en general le hubiera faltado más “tiempo en el horno” para poder pulir sus asperezas. Si quieren una película de acción y aventura sencilla y sin muchas pretensiones, creo que Tomb Raider: Las Aventuras de Lara Croft puede ser una buena opción, nada del otro mundo pero lo suficientemente entretenida para pasar el rato, aunque eso sí, hay mejores opciones que esta.

Tomb Raider: Las Aventuras de Lara Croft: 2/5. Meh.
 
 
 
 
 
 
 
 
Mejor que:Lara Croft Tomb Raider: La Cuna de la Vida (2003).
No tan buena como: Lara Croft: Tomb Raider (2001).
author image |marzo 19, 2018

 
Tal vez sea porque ya me desensibilicé al ver tantas películas de terror y por eso la gran mayoría de ellas me resultan demasiado monótonas, más “pan con lo mismo”, o quizás en verdad la gran mayoría de los filmes de horror que llegan al cine son simplones y no ofrecen nada que no haya visto antes. Sea cual sea el caso, La Maldición de la Casa Winchester deja una impresión tan débil que estoy casi seguro que olvidaré que la vi en cuanto terminé de hacer esta reseña.
En La Maldición de la Casa Winchester veremos a una familia atormentada por una malévola presencia que los acosa en su propia casa. Eric Price (Jason Clarke) es un médico que ha sido contratado por la compañía de rifes Winchester para examinar la salud mental de la socia mayoritaria de la empresa, Sarah Winchester (Helen Mirren). Eric reconoce que la señora Winchester es bastante excéntrica, pero la extraña personalidad de Sarah parece justificarse al descubrir que la mansión en la que vive está llena de actividad paranormal cada vez más perturbadora, lo cual podría poner en riesgo la vida de todos los habitantes de la mansión Winchester.
“Jumpscares”, eso es lo único que tiene esta película. La típica escena oscura donde por un segundo podemos ver una imagen “fantasmal” acompañada de un fuerte sonido de la banda sonora, el equivalente a que alguien te agarre desprevenido (sin albur) y te grite a la cara “¡Booo!”. Es molesto y tal vez si logré hacerte sobresaltarte por un instante, pero termina siendo una “técnica” tan sobre explotada que poco a poco va perdiendo efectividad y desafortunadamente este es el único recurso que utiliza esta película para tratar de espantarte.
La trama se sabotea a sí misma, ya que en ocasiones parece querer vendernos la idea de que los hechos sobrenaturales son simples alucinaciones de los personajes, algo que sería un misterio interesante si no fuera porque desde la primera escena se nos muestra que la casa en verdad está llena de fantasmas, con ello revelándonos la respuesta a un misterio que ni siquiera se ha planteado todavía, porque ya saben, toda buena historia de terror se cuenta del final para atrás, aun cuando la misma naturaleza del relato no se presté para eso.
La película si tiene momentos divertidos, aunque no de la forma en que se podría esperar de una supuesta historia de terror. A continuación voy a arruinarles el final de la película, así que si tienen el más leve interés por esta producción, dejen de leer esto. La forma en la que terminan venciendo al fantasma es… con una  bala. Sip, en esta película “matan” a un fantasma a balazos. Diría que el concepto es menos ridículo en el contexto en el que se presenta dentro de la historia, pero nop, aun sabiendo todos los detalles sigues siendo una resolución bastante estúpida. Películas gringas: donde la causa y la solución a todos los problemas de esta vida y la otra pueden resolverse con un arma de fuego.
Si he de decir algo bueno sobre la película… en realidad no se me ocurre nada. La cinta es “funcional”, la atmosfera es completamente genérica, sin nada que la haga destacar de las miles de películas de “casa embrujada”, pero al menos la producción es medianamente funcional. La única manera en que este filme le pueda dejar un verdadero impacto al espectador sería si ese hipotético público nunca ha visto ninguna otra película de terror en su vida. Completamente genérica y sin ninguna gracia propia, La Maldición de la Casa Winchester será recordada como “una más del montón” o lo que es lo mismo, no será recordada en lo absoluto.

La Maldición de la Casa Winchester: 1/5. Mala.
 
 
 
 
 
 
 
Mejor que: Demonio de Media Noche (2016).
No tan buena como: La Noche del Demonio: La Ultima Llave (2018)
author image |marzo 15, 2018

 
Ya sé que el iluso soy yo por seguir esperando producciones sobresalientes por parte de la industria del cine mexicano, pero en mi defensa, en esta ocasión esa esperanza no estaba fundada en simples ilusiones, después de todo Huevocartoon ya tiene experiencia en producciones cinematográficas, y es precisamente por esto que me es difícil entender como Marcianos vs Mexicanos se siente como un trabajo tan burdo y poco profesional, siendo la menos agraciada de las películas producidas por esta compañía de animación mexicana.
En Marcianos vs Mexicanos veremos… bueno, el titulo explica bastante bien el concepto. Cuando un robot explorador se topa con vida en marte, la raza humana descubre que no está sola en el universo, desafortunadamente los marcianos no son del todo amigables y deciden atacar la tierra. Mientras el mundo entero se ve atacado por los alienígenas, el único país que no se ve afectado por la invasión es México, por lo que el gobierno estadounidense recluta a una “típica” familia mexicana para derrotar a los marcianos y salvar el mundo.
La premisa resulta bastante simple, y no lo digo como un insulto, al contrario, después de todo si los gringos son los salvadores del mundo en prácticamente TOOOODAS sus películas ¿Por qué no hacer que México salve al mundo en una película mexicana? Si la idea suena demasiado ridícula, esto se debe a que lo es, pero ese es el punto de partida para la comedia de la cinta, que toma la muy buena decisión de nunca tomarse en serio su propia historia, dándonos algunos chistes que recurren a romper “la cuarta pared” y señalar lo tonta de la trama, chiste que resulta gracioso al principio pero mucho, mucho menos en cada ocasión que se repite la misma broma, y vaya que se repite con demasiada frecuencia.
La trama se escuda en que es una “parodia”, pero más allá de repetirnos una y otra vez que se trata de una chite por sí mismo, la cinta nunca utiliza otro recurso más que el estereotipo para tratar de hacernos reír. No, no soy de esos mamilas que se escandalizan y hacen berrinche cuando algo los saca ligeramente de su zona de confort.  No pienso que los estereotipos de personajes mexicanos me resulten “ofensivos”, al contrario, sabiendo que son una exageración de varias figuras de la vida cotidiana promedio del mexicano es parte del chiste, el reírnos de nosotros mismo y exagerar nuestras propias fallas resulta algo divertido… al principio. El problema con los personajes y situaciones que presenta la película es que el “chiste” nunca va más allá de ser estereotipos, un molde divertido pero predecible y que, como el resto de la producción, gradualmente va perdiendo la gracia hasta que la sonrisa en nuestro rostro desaparece completamente.
Lo repetitivo del humor es el menor delos problemas del filme, lo peor de todo es la animación. No hay otra forma de decirlo, la animación es mala, de hecho algunas de las producciones web del mismo Huevocartoon tiene mejor animación que Marcianos vs Mexicanos. Constantes errores de continuidad, personajes que varían en anatomía de cuadro a cuadro y una paleta de colores demasiado “chirriante” (por lo menos para mi gusto), hacen que la película te canse la vista rápidamente… ok, tal vez eso sólo sea mi caso y una señal de como mi edad avanzada me acerca cada vez más a la muerte, pero de que la animación es mala eso que ni qué.
Sería hipócrita de mi parte decir que Marcianos vs Mexicanos no es divertida, porque sí lo es y logro hacerme reír de vez en cuando, pero el hecho que la película te cuente el mismo chiste una y otra y otra y otra vez, hace que la gracia se pierda rápidamente. En cuanto a la animación eso es algo que es difícil de justificar, ya que aunque no sean precisamente maravillas del medio, las producciones anteriores de Huevocartoon para cine han contado con mucha mejor calidad que esta película. Inventando una métrica sin ningún sentido y completamente de la nada, yo diría que Marcianos vs Mexicanos tiene un 15% de gracias, que sigue siendo más graciosos que muchas otras producciones mexicanas, pero no lo suficiente como para recomendar verla en el cine, si acaso esperen a que la pasen en televisión (probablemente súper recortada por la censura) o de plano cómprenla pirata.

Marcianos vs Mexicanos: 1/5. Mala.
 
 
 
 
 
 
 
No tan buena como: Una Película de Huevos (2006), Otra Película de Huevos (2009), Un Gallo con Muchos Huevos (2015), El Santos vs La Tetona Mendoza (2012) Esa última es de otro estudio, pero sigue siendo mejor que Marcianos vs Mexicanos.
Mejor que: No sé… los primeros cortos animados de Huevocartoon quizá.
author image |marzo 12, 2018

 
No creo que sólo me suceda a mí, pero a veces el simple hecho de que una película tenga a uno o varios actores que no sean de tu agrado es suficiente para que la producción en general no te caiga del todo bien; del otro lado de la moneda  tenemos cintas protagonizadas por actores que sí te agradan pero que, por muy buenas que sean sus participaciones, el resto de la producción no es suficientemente bueno como para siquiera justificar su existencia, es este segundo caso en el que cae ¿Quién #$% Es Papá?
En ¿Quién #$% Es Papá? veremos las aventuras de un par de hermanos en busca de su verdadero padre. Peter (Ed Helms) y Kyle Reynolds (Owen Wilson) asisten a la boda de su madre, quien les rebela que su padre aún vive y no falleció cuando eran niños como creyeron durante años, el único problema es que debido a su “desenfrenado” estilo de vida, la madre de los Reynolds no está segura de quien es el padre biológico de sus hijos. Decididos a descubrir la verdad, Peter y Kyle se ponen a buscar a su verdadero padre atreves de todo el país.
¡Miren! Owen Wilson interpreta el papel del tipo relajado que se la vive de fiesta y que parece incapaz de tomar nada en serio… es decir que hace el mismo papel que siempre interpreta en prácticamente todas sus películas. En contraste tenemos a Ed Helms, quien es un personaje “serio”, que se apega todo el tiempo a las reglas y que difícilmente se da el lujo de relajarse… es decir que hace el mismo papel que siempre interpreta en prácticamente todas sus película. Este solo es un ejemplo de la poca originalidad de la cinta.
La trama implementa una formula y nunca se despega de ella. 1.- Los hermanos se encuentran con un candidato para padre. 2.- Los hermanos pasan el tiempo con su recién descubierto papá, implementando la mayor cantidad de chistes malos en el proceso. 3.- Los protagonistas descubren que la persona con la que conviven no es su padre y empiezan de nuevo su busque. Regresen al paso 1 y repitan tratando de evitar no quedarse dormidos por lo predecible y monótono de la historia.
La naturaleza repetitiva también se refleja en los chistes. 40% de las bromas son chistes de “me cogí a tu mamá”, 40% es burlarse de que uno de los protagonistas es un proctólogo, dejando el 20% restante para situaciones completamente al azar que no logran ser graciosa por más que lo intentan.
A diferencia de otras “malas” comedias, ¿Quién #$% Es Papá? no me hizo enojar, no sentí que estuviera insultando la poca inteligencia que tengo, en cambio sus predecibles y tontas payasadas parecían querer hacerme dormir. Quizá lo mejor que puedo decir sobre ¿Quién #$% Es Papá? sea que, aunque intenta darnos bromas “subidas de tono”, nunca llega a ser ofensiva o demasiado maliciosa, pero tal vez por esto mismo la comedia termina siendo demasiado simple y aburrida. Tal vez ustedes si encuentren la gracia a esta película, pero el hecho de que me haya hecho bostezar más que reír hace que me sea imposible recomendar ver esta cosa.

¿Quién #$% Es Papá?: 1/5. Mala.
 
 
 
 
 
 
 
Mejor que: Mentes Maestras (2016).
No tan buena como: Vacaciones (2015), Todo Un Parto (2010).
author image |marzo 07, 2018

 
Constantemente me quejo de la “poca originalidad” que puede tener la historia de una película, pero seamos completamente honestos, ser original es muy difícil, tal vez hasta imposible, después de todo la raza humana tiene miles de años contando historias, así que es lógico pensar que ya se ha dicho y hecho todo lo que se pude hacer a la hora de hablar de un medio narrativo, es por esto que en la mayoría de los casos, lo más importante en una historia de ficción no es el “que” se nos cuenta, sino el “como”. Tomen como ejemplo Operación Red Sparrow, que a primera vista es una de tantas películas de espionaje pero que decide dar un enfoque diferente a esa fórmula, un giro que cuyo principal objetivo parece ser sacarnos por completo de nuestra zona de confort.
En Operación Red Sparrow veremos a una mujer adentrándose al mundo del espionaje internacional. Dominika Egorova (Jennifer Lawrence) es una mujer que se ve obligada a dejar su carrera como bailarina después de un trágico accidente. Viendo potencial en Dominika, Ivan Dimitrevich (Matthias Schoenaerts) recluta a la joven en un programa de espionaje conocido como “Red Sparrow”, lo cual hará que Dominika se adentre a un mundo de engaños, política y espionaje que la cambiara para siempre.
Cuando escuchamos la palabra “película de espías” inmediatamente pensamos en personajes como James Bond, o si tienen mal gusto Jason Bourne, pero hay algo importantísimo que deben de tomar en cuenta: Operación Red Sparrow NO es ni de cerca una película de acción. La producción sí toma elementos comunes de las historias de intriga entre espías, pero decide verlas desde una perspectiva diferente. Red Sparrow, al menos en parte, es una deconstrucción de la figura “típica” de la llamada “Femme Fatale”, el tipo de personaje despampanantemente atractivo que puede seducir a cualquier hombre, mujer o quimera y obtener lo que quiere.
Lo que Red Sparrow trata de ilustrar es el hipotético entrenamiento que se llevaría a cabo para crear a esa figura de “mujer fatal”, un proceso que es todo menos glamoroso y que la mayor parte del tiempo es simplemente repulsivo, algo que va a ser muy, MUY difícil de digerir para la mayor parte del público. Podría decirse que el filme toma toda oportunidad que puede para hacer pasar a su protagonista por la mayor cantidad de situaciones incomodas (y decir eso es quedarse muy corto), en ocasiones con malicia casi injustificada, pero me atrevo a decir que ese es precisamente el punto del filme, desmitificar un estereotipo del cine y hacernos pensar en situaciones relacionadas con ese mismo cliché que, por lo general, nunca tomamos en cuenta, algo que es un proceso difícil y bastante desagradable.
La trama en general es un poco más convencional, con intriga, motivaciones secretas y lealtades que nunca quedan del todo claras hasta el final de la historia, algo que puede mantener enganchado al espectador, pero eso sí, en ocasiones la misma naturaleza de la intriga hace que la trama sea difícil de seguir, haciendo que muchas veces sea difícil discernir quien está haciendo que y por qué motivo, algo que pude resultar demasiado confuso y frustrante para algunos.
Lo rebuscado de la trama no es el único problema del filme. Una de las subtramas de la cinta es una relación romántica entre dos de sus personajes, la cual en ningún momento se siente creíble, y al tratarse de un elemento importante dentro de la historia, hace que parte de la trama se sienta demasiado forzada. Además de estas inconsistencias tenemos otros detalles que nos sacan del mundo ficticio que se nos presenta, como el hecho de que la protagonista sea una bailarina de valet más o menos reconocida que se pasa al mundo del espionaje sin que nadie se dé cuenta o que una organización nacionalista rusa hable todo el tiempo en inglés. Todos estos pueden ser pequeños detalles por sí solos, pero la acumulación de los mismos hace que la credibilidad de la trama se pierda en más de una ocasión.
Quiero poder recomendar Operación Red Sparrow, pero es inevitable hacerlo con ciertas reservas. Fuera de las fallas ya antes mencionadas, el hecho de que muchas escenas sean demasiado crudas, grotescas y violentas hace que la película te haga sentir muy incómodo, incluso hasta culpable, mostrándote escenas que te hace pensar que ni siquiera deberías de ver, y aunque pienso que ese es precisamente el punto de la producción, esto puede resultar un proceso demasiado repulsivo para la mayoría. Por otro lado la trama puede ser difícil de seguir y el hecho de que la cinta tenga más de dos horas de duración la convierten en algo demasiado pesado, sin embargo si quieren un representación no tan común sobre el mundo del espionaje cinematográfico, vale la pena que le echen un ojo a esta película.

Operación Red Sparrow: 3/5. Buena.
 
 
 
 
 
 
Mejor que: Atómica (2017), Agente Salt (2010).
No tan buena como: Puente de Espías (2015). Ok, lo acepto. Eso es comparar peras con manzanas, pero mi marco de referencia en cuanto películas “serias” de espías es muy limitado.
author image |marzo 06, 2018

 
Lo primero en lo que pensamos (por lo menos en mi caso) al escuchar “película de guerra”, es la imagen del heroico soldado en el campo de batalla, una viñeta reconocible para cualquiera, para bien o para mal un tanto sobre explotada, sin embargo, lo que muchas veces pasamos por alto es lo que hay detrás de esa imagen, específicamente la política que envuelve a un conflicto armado. Sé que esto suena mucho menos emocionante que ver soldados en acción, pero observar el proceso velico “tras bambalinas” puede ser igualmente fascinante, como lo demuestra Las Horas Más Oscuras.
En Las Horas Más Oscuras veremos los difíciles momentos por los que pasa Winston Churchill. En Inglaterra, en Mayo de 1940 Wiston Churcill (Gary Oldman) toma el cargo de primer ministro. Teniendo las riendas de su país en mano y atravesando un momento crítico para Reino Unido, Churchill deberá tomar las difíciles decisiones que resulten en el bienestar de su nación, algo que no siempre le resultará fácil debido a la escasa popularidad de sus medidas dentro del mismo cuerpo político de su país.
Lo sé, yo también me pongo a bostezar cada que escucho la palabra “política”, pero nos guste o no, sigue siendo un elemento indispensable en cuanto a la sociedad humana, y el estudio de la misma en su propio contexto histórico es importante para comprender nuestra propia vida actual. No, no soy un maestro de historia tratando de animar a sus alumnos a estudiar, al contrario, lo más que sé de historia es lo que veo en History Channel, es decir aliens y casas de empeño, y ese es precisamente el punto: Las Horas Más Oscuras logra captar tu atención sin importar la familiaridad que tengas con los temas alrededor de la segunda guerra mundial, claro que es una ventaja contar con ese interés previo, pero no es ni remotamente necesario para disfrutar del filme.
La historia se centra en la perspectiva de Churchill y las difíciles decisiones que debe tomar, haciéndonos recordar que los famosos nombres que vemos en los libros de historia no dejaron de ser seres humanos de carne y hueso, llenos de imperfecciones y dudas, lo cual solemos olvidar con frecuencia. La película se dedica a humanizar la figura histórica de Wilston Churchill, algo que se logra con la excelente interpretación de Gary Oldman. Para cuando lean esto Gary Oldman ya ganó el Oscar por mejor actor, premio que está más que bien merecido pero también es importante señalar que el resto del reparto hace un excelente trabajo.
No les voy a mentir, estoy teniendo problemas en hallar algún aspecto que pueda criticar como “malo” y solo puedo pensar en pequeñeces. Ciertos efectos de transición de escena a escena se ven utilizados con demasiada frecuencia, haciendo que este elemento sea menos interesante cada vez que lo vemos en pantalla, pero creo que eso es algo que la mayor parte del público ni siquiera notará. Otro detalle similar son algunas de las metáforas visuales, las cuales en ocasiones tal vez sean demasiado obvias, pero el hecho de que siempre sean adecuadas y atractivas visualmente hacen que me sienta que me estoy quejando solo por quejarme, desesperadamente buscando un “negrito en el arroz”.
Ya sé que la idea de ver una película sobre historia y política no suena demasiado atractiva, pero créanme que La Horas Más Oscuras resulta tan fascinante que es imposible no poner toda tu atención en la producción, aun cuando sabes exactamente en qué va a terminar la cinta, al menos si es que tienes una leve familiaridad con la historia mundial. Más humana de lo que se pudiera pensar, interesante y sobre todo entretenida para cualquiera, Las Horas Más Oscuras es una producción que vale la pena ver en el cine, es más, si me dejan desvariar un poco, propongo que de ahora en adelante Las Horas Más Oscuras, Dunquerque y La Caída sean una trilogía estilo Star Wars o El Señor de los Anillos pero de la segunda guerra mundial. Digan lo que quieran, pero esas tres cintas funcionan muy bien entre si, y quien sabe, a lo mejor le ayude a más de uno en algún examen de historia o algo así.

Las Horas Más Oscuras: 4/5, Muy Buena.
 
 
 
 
 
 
 
 
Mejor que: Victoria y Abdul (2017, The Post: Los Oscuros Secretos del Pentágono (2017).
No tan buena como: Dunquerque (2017).
author image |marzo 01, 2018

 
Steven Spielberg sigue siendo uno de los directores contemporáneos más importantes en el cine, haciendo que su nombre sea casi un sinónimo de calidad, algo que a su vez hace que Spilberg  sea uno de los pocos directores que puede darse el lujo de dormirse en sus laureles y no verse afectado por ello. Como ejemplo de lo anterior tenemos The Post: Los Oscuros Secretos del Pentágono, una película que puede no ser sorprendente ni el más notable trabajo de su director, pero que sigue contando con la calidad a la que Spielberg nos tiene acostumbrados.
En The Post: Los Oscuros Secretos del Pentágono veremos las difíciles decisiones que un grupo de periodistas deben de tomar. Durante la guerra de Vietnam, Daniel Ellsberg (Matthew Rhys) un corresponsal de guerra, comienza a investigar las razones del gobierno para continuar con el conflicto, descubriendo que el gobierno estadounidense continúa alentando la guerra aun sabiendo que se trata de una causa perdida. Descorazonado por su descubrimiento, Ellsberg comienza a filtrar documentos ultra secretos a la prensa estadounidense, lo cual comenzara con una difícil batalla por parte de la prensa para defender la libertad de expresión.
Las películas basadas en eventos históricos siempre tienen la difícil tarea de presentarnos de manera (relativamente) entretenida lo que tal vez no pueda llamar la atención de todo el mundo, esto lo digo porque The Post trata de presentarnos uno de los escándalos más controversiales en la historia de Estados Unidos, desenredando acontecimientos que, simplemente, no hay forma de simplificar, por lo menos no completamente. La película no solo nos muestra los eventos históricos ocurridos en la época de los 60´s (si lo hiciera esto se consideraría un documental y no un drama), sino que nos ilustra las complicaciones, tanto morales, éticas e incluso legales alrededor de este particular capítulo de la historia, lo cual, hay que reconocer, a menos que sean fans de la historia en general, les hará pensar que The Post es tan entretenida como una clase de historia en la secundaria, lo cual no es del todo cierto.
Lo interesante del filme es la forma en que nos muestra las ramificaciones de las acciones que toman sus personajes, navegando en un mar de tonos grises y que carece de respuestas fáciles. Es fácil, sobre todo al hablar de la trama de una película, que lo más sencillo y esperado es que “los buenos le ganen a los malos”, lo que no siempre se toma en cuenta es que tan peligroso puede ser el resultado de dicha victoria. Simplificando torpemente la trama, todo se “reduce” a decidir si se publica una controversial historia en un periódico o se deja pasar por alto, algo que sería la opción más “segura”, pero que pondría ser el primer paso para perder la libertad de expresión de todo un país. De nuevo, tal vez eso no suene tan interesante, pero la forma en que el filme presenta estas conjeturas resulta muy intrigante para el espectador.
Lo que podría ser un tanto problemático es que todas las vueltas que se le dan al conflicto en cuestión hacen que la cinta se sienta repetitiva, y con ello un tanto aburrida, pero esa repetición, ese “darle vueltas al asunto” es precisamente el punto de la historia, el hecho de que hacer lo correcto es mucho más fácil de decir que de hacer. Otro problema, por lo menos para mí, es que el filme se siente hecho por comité, haciendo que la película se sienta hecha única y exclusivamente para apelar a los snobs estirados y mamones que se encargan de repartir premios, lo cual es un problema pos sí mismo, ya que esto provoca que la producción en verdad se aun trabajo de cálida, eso es innegable, pero también hace que la cinta parezca muy poco sincera, buscando ganar premiso antes que contar una historia interesante o tener algo importante que decir.
La pregunta importante aquí es ¿The Post: Los Oscuros Secretos del Pentágono es una buena película? La respuesta es fácil: Sí, lo es. Segunda pregunta ¿La recomendarías? Eso es más difícil de contestar. Las actuaciones y  dirección son buenas, pero nada verdaderamente sorprendente, algo que se extiende a la misma trama, la cual a veces parece estancarse, haciendo que la historia se sienta lenta. Sí son fans de Spielberg o en su defecto les gustan los dramas históricos, yo diría que vayan a verla al cine, pero sin esperan a que salga por streamign, DVD o algún otro formato casero, creo que es mejor verla desde la comodidad de su casa, así tendrán el beneficio de poner pausar la trama e ir al baño de vez en cuando, porque la película si es un poco larga.

The Post: Los Oscuros Secretos del Pentágono: 3/5. Buena.
 
 
 
 
 
 
Mejor que: Jackie (2016).
No tan buena como: En Primera Plana (2015), Barry Seal: Solo en América (2017)
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