Curso relámpago no oficial sobre estudios de animación. Si quieren una buena película de animación por computadora vayan con Pixar, si quieren lo mejor de animación tradicional vean a Ghibli, para hermosa animación “stop motion” tenemos a Laika y al final, pero definitivamente no menos importante, si desean una graciosa película de “claymation” tenemos a Aardman. No pienso esconder el hecho de que soy un gran fan de Aardman Animations, algo que sesga lo que, supuestamente, debería ser mi opinión imparcial a la hora de hablar de su trabajo, por lo que aun reconociendo que El Cavernícola no está ni cerca de ser lo mejor de este estudio de animación, debo decir que resulta lo suficientemente entretenida para pasar el rato.

En El Cavernícola veremos las aventuras de un simpático hombre prehistórico y su tribu. Dug es un cavernícola que vive felizmente junto con sus amigos en un aislado valle. La tranquilidad de Dug se ve interrumpida cuando su hogar es capturado por el malvado Lord Nooth, quien expulsa a Dug y sus amigos fuera del valle. Para recuperar su hogar, Doug deberá enfrentar a los invasores en un milenario, místico y sagrado ritual conocido como un partido de Futbol.

Puede que no sea de agrado de muchos, pero el simple hecho de que la animación con muñecos de plastilina sea una labor tan complicada, lenta y sumamente laboriosa es más que suficiente para que una producción que se anime a utilizar esta técnica de animación se gane mi admiración y respeto.  En lo que a mi concierne, Aardman Animations es el mejor en el negocio de este tipo de animación, experiencia que se ve reflejada en El Cavernícola.

La comedia física y el característico diseño de personajes tiene el distintivo sello Aardman, haciendo que la producción en general sea bastante entretenida, pero eso sí, mucho del humor se siente demasiado sencillo y más de un chiste parece reciclado de algún viejo episodio de Los Picapiedra, sobre todo al ver a los personajes utilizar animales como ropa o artículos de tecnología contemporánea, bromas simpáticas pero que ya se sienten bastante gastadas.

Algo que también se siente bastante cansado es la historia misma. El chiste principal es ver el “choque” entre la era de piedra y la era de bronce, representada en un simpático partido de futbol, pero a final de cuentas la trama se reduce a la gastada formula del equipo deportivo sin experiencia que debe superar a un rival mucho más fuerte. Si han visto una sola película con esta trama ya sabrán exactamente como terminan la historias, lamentablemente El Cavernícola no hace nada para despegarse de esa trillada formula.

El Cavernícola es entretenida y les hará pasar un buen rato, pero aunque no quiera aceptarlo, resulta una de las producciones más flojas de Aardman Studio hasta la fecha, no mala, que eso quede claro, pero no tan creativa o graciosa como lo a lo que nos tiene acostumbrados este estudio de animación. Si son fans de este estilo de animación (como en mi caso), definitivamente El Cavernícola vale la pena, pero si este es el primer acercamiento a esta técnica de animación, yo les recomendaría empezar con alguna de las otras producciones de Aardman Animations.

El Cavernícola: 2/5. Meh.

 

 

 

 

 

 

 

 

Mejor que: ¡Piratas! Una Loca Aventura (2012).

No tan buena como: Pollitos en Fuga (2000), Wallace & Gromit: La Maldición de las Verduras (2005), Lo que el Agua se Llevó (2006), Shaun El Cordero (2015)