No es ningún
secreto que soy fan de Marvel y su universo cinematográfico, pero eso no
significa que sus películas sean infalibles. Hasta el momento el estudio Marvel
no tiene una sola producción que pudiese llamarse mala, tal vez un poco decepcionantes
como Iron Man 2 o Los Vengadores: La Era de Ultron, pero
no verdaderamente mala, lo que para mí es un hecho preocupante. Cuando estas en
la sima solo hay dos posibilidades: O te quedas en ese punto alto o comienzas
el camino hacia abajo, por lo que sé que tarde o temprano el descenso de Marvel
será inevitable… pero Capitán América: Civil
War solo muestra que ese fatídico momento no se ve en el futuro cercano.
En Capitán América: Civil War veremos cómo diferencias
ideológicas empiezan a separar al equipo de superhéroes conocido como los
Vengadores. Lo héroes más poderosos de la tierra siguen peleando alrededor del planeta
para tratar de mantener al mundo seguro, pero esa lucha se vuelve cada vez más
violenta, dejando lamentables daños colaterales. Tras un accidente en Nigeria,
la opinión pública sobre los Vengadores empieza a cambiar y se piensa que el
grupo actúa con impunidad en todo el mundo. Cuando la ONU plantea un tratado
para hacer que los superhéroes trabajen de una manera más apropiada, Steve
Rogers (Chris Evans) y Tony Stark (Robert Downy Jr.) tendrán opiniones muy
distintas en cuanto a dicho tratado, lo que será solo el primer paso que
fracture a la unión entre los héroes.
Siempre he
dicho que una película debe valerse de sus propios medios para contar su historia
y aunque Civil War sigue esta regla,
es inevitable señalar que no es un buen punto de entrada para aquellos que
quieran conocer por primera vez el Universo Marvel. El conflicto dentro de la
trama es autocontenido, pero no así los personajes. Puedo imaginar que si esta
es la primera película de Marvel Studios que alguien ve no tendrá ningún
problema siguiendo la historia, pero puede que sea difícil hacer lo mismo con
los protagonistas, esto se debe a que la gran mayoría de ellos ya han tenido
por lo menos una cinta propia para desarrollar sus personalidades y si no se
tiene una mínima noción de quien es quien, es muy probable que los espectadores
menos experimentados se queden rascándose la cabeza preguntándose quien es
quien y porque hacen lo que hacen. Supongo que lo que trato de decir es que no
es obligatorio ver TOOODAS las películas anteriores de Marvel, pero
definitivamente tampoco hace daño.
Y sin hacer a
un lado el tema de los personajes, es sorprendente el manejo de los mismos. El
hecho de que el reparto sea tan grande podría ser un problema al tratar de
dividir el tiempo en pantalla entre tantos participantes, pero cada héroe es
tratado de manera muy buena, por lo que todos, TODOS tienen más de un momento
en el que brillan, esto incluye a los personajes que hacen su debut en esta película.
Los fans de Black Panter tendrán un muy buen sabor de boca al ver por primera
vez al héroe en la pantalla grande y ni que hablar del tan esperado regreso del
amigable vecino de todos, Spider-Man. Si hay un personaje que no termina de
encajar en todo esto, en mi opinión sigue siendo Visión, un problema que ya se había
presentado en La Era de Ultron y que
desgraciadamente sigue sin resolverse en esta película.
Y ya que
estamos hablando de problemas, hay que mencionar uno que ha arrastrado el
Universo Cinematográfico Marvel desde su concepción. Los superhéroes siguen
siendo coloridos, carismáticos y sumamente interesantes, pero los villanos (excluyendo
al favorito de todos, Loki) siguen siendo algo mediocres, y esta mala costumbre
continua en Civil War. Aunque el
villano definitivamente es parte importante de la trama, resulta el punto más débil
de la misma. Se siente como si el antagonista en turno se agregó de último
momento para crear a alguien que manipulase los hechos tras bambalinas y de
esta manera hacer que los héroes “se laven las manos” y no hacerlos completamente responsables de
sus actos al agarrarse a golpes los unos a los otros, lo cual es entendible,
pero el simple debate de ideologías entre los dos lados en conflictos me parece
un tema bastante interesante por sí mismo sin necesidad de agregar una subtrama
que incluye a un aburrido y olvidable villano.
En muchos
sentidos Civil War cumple con uno de
los objetivos más ambiciosos de Marvel hasta la fecha: ser un punto donde
culminan, continúan e incluso inician varias historias de los héroes Marvelitas,
algunos que hemos llegado a conocer alrededor de varios años y otros tantos que
se integran a este universo cinematográfico, de manera similar a lo que hizo
tan memorable la primera película de Los
Vengadores. No creo ser el único que resulto decepcionado con La Era de Ultron, y tampoco creo que
Marvel haya pasado por alto la reacción de los fans ante esa película, por lo
que Civil War se siente casi como una
disculpa. Puede que el Capitán América sea el protagonista y este sea
(supuestamente) el desenlace de su propia trilogía, pero para efectos prácticos
Civil War es todo lo que una buena película
de Los Vengadores debe ser y más.
Capitán América:
Civil War: 4/5. Muy buena.
Mejor que: Los
Vengadores: La Era de Ultron (2015), Capitán América y el Soldado del Invierno
(2014)
No tan buena
como: Los Vengadores (2012), Deadpool (2016). Y lo siento mucho, sé que los fans me van a
odiar aún más de lo que ya lo hacen, pero la verdad debe ser dicha a toda
costa, le arda a quien le arda. Lo que trato de decir y a lo que le estoy dando
tantas vueltas por miedo a ser linchado es que… Civil War también es mucho
mejor que Batman V Superman: El Origen de la Justicia (2016).
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